Osteopatía en Igualada

Podemos utilizar la osteopatía en Igualada para prevenir, aliviar y curar una larga lista de patologías, síntomas y síndromes como lumbalgia, ciática, cervicalgia, mareo...

La osteopatía es una terapia que utiliza técnicas manuales y que tiene una visión global del cuerpo humano. Tiene en cuenta las conexiones que existen entre las diferentes partes del cuerpo a través del sistema nervioso, el aparato circulatorio, el circuito linfático y el tejido conjuntivo. En el cuerpo humano, no hay espacios vacíos, se rellenan con tejido conjuntivo, que también formará los tendones, las membranas y los ligamentos que unen físicamente estructuras que aparentemente no están relacionadas. Así pues, en osteopatía entendemos que todo está conectado.

Según esta filosofía, puede ser que acudamos a la consulta de un osteópata por dolor lumbar y que nos realice el tratamiento en el pie, puede sorprendernos, pero funciona.

La osteopatía tiene buenos resultados (a veces espectaculares) porque su objetivo es reestablecer el buen funcionamiento del cuerpo, no sólo hacer desaparecer el síntoma. Si todo funciona bien, el dolor no aparece. El dolor es una alarma de que algo no va bien. Por ejemplo, en casos de dolor lumbar, se considera a grandes rasgos que si las vértebras de la columna se mueven bien, los músculos que se adhieren a ellas pueden funcionar bien, sin contracturas ni lesiones. Este principio se aplica a todo el cuerpo con lo que algunos llaman osteopatía craneal , osteopatía visceral y otras. En estos casos, no se trata de una osteopatía diferente, en el fondo es lo mismo: detectar lo que no funciona y arreglarlo para que se mueva y funcione bien. La diferencia radica en los tejidos que reciben el tratamiento y en las técnicas empleadas, pero todo está integrado en el tratamiento osteopático, que será personalizado para cada paciente adaptándose a sus características y su dolencia en cada momento.

Después de seis años de estudios y mucha práctica, un osteópata tiene las manos entrenadas para detectar estas alteraciones funcionales (que no llegan a ser patologías y pueden pasar desapercibidas durante años) mediante una exhaustiva exploración. Básicamente, se valora el movimiento de las estructuras corporales.

A partir de estas bases, se puede utilizar la osteopatía para prevenir, aliviar y curar una larga lista de patologías, síntomas y síndromes como lumbalgia, ciática, cervicalgia, mareo, vértigo, migraña, dolor de cabeza, tendinitis, dolor menstrual, cólico del lactante, acidez, etcétera...

Por todo ello, recomendamos sinceramente esta terapia para curar dolores de espalda, prevenir lesiones, garantizar el cierre correcto de las fontanelas del cráneo del bebé (sobretodo si presenta plagiocefalia, sufre otitis frecuentemente, está inquieto o llora mucho), para sentirse más ágil e incluso para aquello que todavía no se sabe si puede funcionar, porque la osteopatía es aún muy joven.